Yo te perdono por el mal que algún día nos causaste.
Te dejo ir al más allá, sin pendientes de que asustarse.
Por mí lado te libero de ataduras terrenales
Y te perdono por lo que, para mí, fueron maldades.
Prefiero que mi corazón esté en paz con el pasado
Pues no sabría qué sería, el hoy, sin ti en nuestro hado.
Te dejo libre y te lloro, pues lo importante es lo otro;
Bellos momentos que vivimos, así de estos haya pocos.
Tal vez después, en otra vida, o al otro lado del velo,
Sea el momento de hablar y poner todo en el ruedo.
Sacar del pecho las heridas y sanar los corazones,
Y olvidarnos del pasado y aliviar las emociones,
Yo te perdono y aprovecho este momento de entereza,
Pedir también a ti perdón, así lo haga con torpeza.
Pues yo también te hice daño y no aprecié lo que me dabas
Y quiero que, cuando te siga, no me recuerdes por maldades.
Perdón te pido, ya que sé, todo el esfuerzo que hiciste,
Y todo lo que sacrificaste, así como prevaleciste.
Perdón te pido por el daño que llegara a causarte
Y en paz espero que te vayas, no vengas más a atormentarme.
Miércoles, 9 de diciembre de 2020